En Recetas Nestlé® te mostramos un gran truco de repostería
Una de las grandes lecciones de la cocina es que con una misma receta como base podemos preparar distintos platos con diferentes sabores. Un ejemplo muy bueno lo encontramos en la repostería. Si aprendemos cómo hacer panqués básicos, abrimos la puerta a una inmensa variedad de preparaciones con todo tipo de ingredientes.
En Recetas Nestlé® queremos compartir cómo es que, con una sola base, se pueden cocinar tres panqués de sabores distintos.
RECETAS DE PANQUÉS:
LA CLAVE ESTÁ EN LA MASA BÁSICA
Vamos a hablar de un panqué de zanahoria, otro de plátano y un tercero que es marmoleado. Los tres llevan la misma base, que tiene los siguientes ingredientes.
- 1 ½ barras de mantequilla a temperatura ambiente.
- 1 lata de Leche Condensada LA LECHERA®.
- 3 huevos.
- 1 ½ tazas de harina de trigo.
- 1 ½ cucharaditas de polvo para hornear.
- ½ taza de Leche Evaporada CARNATION® CLAVEL®.
En el video explicamos cómo hacer la base y los tres panqués:
ACÁ IRÍA EL VIDEO QUE YA ESTÁ SUBIDO: https://youtu.be/nIvrH6qD9-M
CONSEJOS PARA TENER EN CUENTA
Aunque sigamos las instrucciones al pie de la letra, puede que la primera vez que intentemos preparar un panqué no nos salga como esperábamos. La repostería tiene pequeños tucos y secretos que hacen la diferencia. Estos son algunos que queremos compartir.
- Cómo enfriar la mantequilla más rápido: estamos listos para empezar a cocinar, pero olvidamos sacar la mantequilla del refrigerador. Para acelerar el proceso, simplemente la cortamos en cuadros más pequeños.
- Siempre es mejor organizar la mesa: en repostería las cantidades precisas son muy importantes. Si nos pasamos por 1 o 2 gramos en algún ingrediente, es posible que el resultado final cambie completamente. Por eso es mucho mejor organizar el espacio donde vamos a trabajar, con las medidas indicadas de cada uno de los elementos que vamos a necesitar.
- Las manos deben estar limpias: esto va más allá de la repostería, en realidad es un consejo para cocinar cualquier plato. Antes de empezar, siempre tenemos que lavarnos las manos con agua y jabón.
- Es mejor romper los huevos en un recipiente aparte: siempre existe el riesgo de que una partecita del cascarón se caiga cuando quebramos los huevos. Si los rompemos en otro bowl, podemos recoger esa parte de la cáscara, corregir el error y después añadirlo a la mezcla.
- Los huevos se añaden uno por uno: para asegurar que se integren correctamente, es mucho mejor tener paciencia y agregarlos individualmente, dejando que se mezcle el primero muy bien antes de añadir los siguientes.
- La harina hay que tamizarla: esto, por un lado, nos ayuda a evitar que el panqué quede con grumos, por el otro, facilita que los ingredientes se integren correctamente.
Excelentes y de fácil preparación gracias