Conoce cómo preparar las galletas de colores más famosas de la repostería clásica
Los macarons, también conocidos como macarrones, son los bocaditos más vistosos de la repostería: pequeñas galletas rellenas que se destacan por sus colores pasteles. Las encuentras en cualquier paleta cromática: azules, amarillas, verdes, rosadas, marrones, naranjas, rojas y púrpuras.
Sin embargo, no solo se destacan por su color sino por su suave dulce y ligero y su textura crujiente. Si pruebas solo uno, te quedarás con ganas de más.
Si tienes curiosidad por el origen de los macarons, el paso a paso para prepararlos y algunos consejos culinarios para lograrlo, quédate con nosotros y aprende todo sobre este postre europeo tan icónico.
¿QUÉ SON LOS MACARONS?
Muchas pastelerías del mundo les muestran a sus comensales estas pequeñas galletas coloridas a través de sus vitrinas. A veces los llama la curiosidad por descubrir a qué sabe cada color de los macarons o simplemente les atrae el gusto por el crujir de una galleta.
Aunque se ven diminutos y simples, la preparación de los macarons no es tan sencilla y, como toda preparación repostera, necesita exactitud en cuanto a sus ingredientes y las cantidades.
Los macarons se elaboran, principalmente, con clara de huevo, almendra molida, azúcar glass, azúcar refinado, colorante y el relleno, que es personalizable y puede variar entre muchos sabores: mermelada, crema de queso, ganache de chocolate, crema de mantequilla, salsa de frambuesa o de limón. Dos galletas de colores y un relleno del mismo color componen al macaron.
Origen e historia de los macarons
El origen de estos bocaditos se remonta al siglo XVII en Italia, cuando en esa época eran un dulce sencillo, sin relleno, colores o variaciones. Su verdadero auge ocurrió cuando llegaron a Francia y se convirtieron en un dulce que no podía faltar en ninguno de los banquetes o las ferias de la burguesía.
Solo hasta 1830, los macarons comenzaron a ser rellenados y fabricados como una especie de “sándwich de galleta”. Gracias a la receta de un molinero francés llamado Louis Ernest Ladurée y su pastelería Maison Ladurée, los macarons empezaron a tener diversos colores para ser más llamativos y convertirse en lo que son ahora.
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PASO A PASO PARA LA PREPARACIÓN DE LOS MACARONS
Después de conocer qué son y de dónde vienen, es hora de ponernos el delantal y comenzar a cocinar. Aquí te contaremos qué debes hacer en cada etapa de la receta.
1. Tamiza los ingredientes secos: en un recipiente, tamiza juntos el azúcar en polvo y la almendra molida, lo que asegurará una masa suave y libre de grumos.
2. Prepara el merengue: en otro tazón, bate las claras de huevo a alta velocidad a punto de nieve y añade gradualmente el azúcar refinado. Continúa batiendo hasta obtener un merengue firme y brillante.
3. Mezcla los ingredientes secos con el merengue: con movimientos suaves y envolventes, incorpora las dos preparaciones anteriores. Para que lo tengas en cuenta, el resultado final debe tener consistencia.
4. Agrega colorante: si quieres que tus macarons brillen con colores pasteles, agrega unas gotas de colorante alimentario en gel o en polvo a la mezcla. Revuelve y distribuye de manera uniforme en la masa.
5. Prepara la manga pastelera: llena una manga pastelera con la masa de macaron y coloca una boquilla redonda lisa en el extremo. En caso de no tener estos elementos, puedes usar una bolsa de plástico con una esquina cortada o utilizar una cuchara para medir las porciones de la masa.
6. Forma los macarons: sobre una bandeja forrada en papel pergamino, forma pequeños círculos de masa con una separación entre cada uno. Golpea suavemente la bandeja sobre una superficie para eliminar las posibles burbujas de aire.
7. Deja reposar los macarons: unos 30 minutos a temperatura ambiente serán suficientes para que se forme una costra en la parte superior. Eso te ayudará a obtener una textura adecuada.
8. Hornea: precalienta el horno (alrededor de 150-160 °C) y luego, mete la bandeja de macarons entre 12 y 15 minutos.
9. Enfría y rellena: retira los macarons del horno, déjalos enfríar completamente antes de despegarlos del papel pergamino. Luego, únelos de dos en dos con tu relleno favorito (ganache de chocolate, mermelada de frutos rojos, crema de vainilla).
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Otros consejos y trucos para preparar el macaron perfecto
- Utiliza claras de huevo envejecidas: las claras de huevo separadas y envejecidas por uno o dos días son ideales para obtener una mejor consistencia en el merengue.
- Ingredientes iguales en cantidades: utiliza la misma cantidad de almendra molida y azúcar glass, un tip que garantiza una textura crujiente y en su punto.
- Controla la temperatura del horno: aunque ya lo mencionamos, te debes asegurar de precalentar el horno y ajustar la temperatura. Supervisa los macarons en la cocción, pues el tiempo de horneado también depende del tamaño de cada bocadito.
- Experimenta y atrévete con los rellenos: no debemos olvidar que la cocina es un espacio donde podemos crear a partir de nuestros gustos. Y a pesar de que la repostería es una ciencia exacta, podemos rellenar nuestros macarons con lo que nosotros queramos.
SIETE IDEAS DE RELLENO DE MACARON QUE TE ENCANTARÁN
Los macarons son un postre muy versátil y personalizable, pues para los rellenos hay una infinidad de posibilidades. Sin embargo, aquí te contamos siete ideas que a nosotros nos parecen deliciosas para acompañar los macarons, para complacer a los amantes del dulce, del chocolate, del merengue y de las frutas.
- Ganache de chocolate negro: la ganache es una crema de pastelería que incluye chocolate negro (entre mejor calidad, más rico quedará), nata y mantequilla. Un sabor intenso y suave que se equilibra muy fácilmente con el dulce ligero de los macarons.
- Crema de frutos rojos: frambuesas, fresas, moras y arándanos pueden acompañar esta crema dulce, frutal y con un toque de ácido. Verás cómo le añade un sabor más fresco a tus macarons.
- Crema de limón: las notas cítricas en un macaron le dan un sabor inigualable. Tan solo necesitas jugo de limón, ralladura de limón, azúcar, mantequilla y huevos.
- Crema de pistacho: los frutos secos también pueden ser una opción deliciosa para el relleno. El aroma y el sabor distintivo del pistacho se destacarán en tu preparación.
- Queso y mermelada: si no quieres algo tan elaborado, simplemente le debes añadir queso crema y la mermelada que más te guste. El dulce y la sal son una combinación que siempre gana en la cocina.
- Crema de almendras y nutella: ¿te gusta un chocolate más tradicional? Este es un relleno suave, delicado y con el punto exacto de dulce. Además, permite que se destaque un poco más el molido de almendras de la galleta del macaron.
- Crema chantilly o de vainilla: también complacemos al paladar clásico, que prefiere una crema tradicional. Si la vas a preparar desde ceros, recuerda añadirle un poquito de esencia de vainilla.
Estas son solo algunas ideas, pero puedes experimentar con diferentes sabores y combinaciones según tus preferencias. ¡Recuerda que la creatividad es clave al hacer macarons!
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FUENTES:
- https://cocina-casera.com/historia-macarons/
- https://www.hogarmania.com/cocina/recetas/postres/macarons-12623.html
- Cómo hacer macarones perfectos | Bien Tasty
- How to Make French Macarons | The Scran Line
- https://www.lavanguardia.com/comer/materia-prima/20171006/431806769783/origen-macaron-francia-saint-jean-de-luz.html