Conoce el origen de este famoso plato y cómo preparar las mejores hamburguesas en casa
A todos nos encanta la hamburguesa, una comida muy famosa y que es el plato insignia de los Estados Unidos. Considerada por muchos como una comida rápida, en los últimos años ha venido dejando atrás esa fama, donde algunos chefs y restaurantes han hecho su propia versión de hamburguesa gourmet. Este delicioso plato, hecho con dos rebanadas de pan y aderezada con todo tipo de ingredientes, se ha convertido en un alimento tan popular que hasta tiene su propia celebración, siendo el 28 de mayo el Día Internacional de la Hamburguesa.
Alrededor del mundo encontramos este delicioso plato en múltiples versiones: de carne, pollo, pescado, vegetariana, con 3 panes, sin pan, con pepinillos, aros de cebolla, tomate, tocino, lechuga, mostaza, salsa de tomate, etc. Sus preparaciones e ingredientes son infinitos, agregándole todo lo que se nos ocurra para tener un delicioso platillo, pero el secreto de una buena hamburguesa se encuentra en su carne.
En Recetas Nestlé® te contamos todo lo que debes saber sobre este delicioso plato y cómo sorprender a tus invitados la próxima vez que prepares unas hamburguesas en casa.
Su origen no es estadounidense
Como mencionamos anteriormente, cuando hablamos de las hamburguesas las asociamos inmediatamente con la comida norteamericana, pero su origen no se dio en tierras americanas. Diferente a lo que muchos de nosotros pensábamos, la hamburguesa nació en Europa. Algunas historias señalan que la hamburguesa surgió por la necesidad de tener un alimento nutritivo y fácil de transportar, donde las tropas del ejército, durante sus travesías, lo guardaban y lo consumían mientras iban cabalgando.
La ciudad alemana de Hamburgo es considerada como la cuna de la hamburguesa, y es de allí de donde proviene su nombre. A principios del siglo XX, Delmonico´s Restaurant, se considera, fue el primer restaurante que empezó a ofrecer la carne redonda, la cual llamaban Hamburg Steak, siendo la antecesora de lo que más adelante llamarían hamburguesa.
Años después este símbolo culinario del país da el salto hasta Norte América, donde poco a poco la van adaptando, le agregan los dos panes y demás ingredientes hasta convertirse en lo que hoy conocemos como una hamburguesa.
Ingredientes de una hamburguesa
Hacer una hamburguesa es bastante fácil, pero no es solo agregar todos los ingredientes posibles en medio de dos panes y ya está. Una buena hamburguesa debe ser fácil de comer, que al primer bocado no se desbarate y debe haber un equilibrio en la cantidad de sus componentes y de sabores.
Los ingredientes en una hamburguesa son tantos como los puedas imaginar, aunque hay unos que son casi regla universal que no pueden faltar, que son el queso, vegetales y por último las salsas.
- Pan: Debe ser fresco y suave, que no tenga un sabor predominante sobre la carne y otros ingredientes. El pan más utilizado para hacer hamburguesas es el brioche, que es dulce y suave y que contrasta perfectamente.
- Vegetales: La lechuga, tomates, cebolla y pepinillos son los más utilizados. Elige ingredientes frescos, lávalos y sécalos muy bien antes de armar tu hamburguesa.
- Queso: El queso debe ir siempre encima de la carne caliente para que allí se pueda fundir y los ingredientes que están encima del queso también queden adheridos a él y no se muevan. A la hora de incorporar queso a tu hamburguesa, busca uno que se funda con bastante facilidad, como los quesos cheddar y mozzarella o los quesos azules.
- Carne: La protagonista de nuestro menú. Las encuentras de res, pollo, pescado o versión vegetariana. Es la parte más pesada y a la que se le debe prestar más atención a la hora de preparar una hamburguesa.
Tal vez pienses que es incorporar todo esto en medio de dos panes y ya está listo, pero no, hasta para armar una hamburguesa debes seguir un orden. El orden para armar una hamburguesa es primero el pan, salsa, cebolla, lechuga, tomate, queso, carne y pan. El queso se pone en la carne caliente para que se adhiera mejor; la lechuga y el tomate tienen agua por lo que deben ir en la parte superior, si se pone en la parte inferior de la carne, al soltar los jugos mojan el pan y al morderla se desbarataría.
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Tipos de carnes
En el mercado encontrarás carne ya lista para cocinar y hacer una hamburguesa en casa, pero por qué no hacerla tú mismo. Como lo mencionamos anteriormente, el secreto de una buena hamburguesa está en su carne.
Carne de res
Lo primero que debes tener en cuenta es que cualquier corte de carne no te va a servir. Si eliges una carne magra, al momento de cocinarla tendrás una carne de hamburguesa seca y es lo que debemos evitar que pase.
En las hamburguesas de res se debe elegir una carne fresca, para poder molerla en casa, y que esta contenga un 70% de proteína y un 30% de grasa natural, nunca añadida. La grasa le aporta sabor y jugosidad y ayuda a que sea más tierna. Cortes grasos como la nuca, el lomo, la costilla o el morrillo son las más utilizados.
Para cumplir con esta regla de 20 a 30% de grasa natural, hay quienes también prefieren optar por hacer mezclas de carne de vacuno y cerdo, al igual que la incorporación de huevo o miga de pan para que la carne quede compacta y no se deshaga en su cocción o al momento de comerla. Su tamaño también es clave, trata de que no queden ni demasiado grandes o muy pequeñas. Para que una carne quede bien cocinada, el tamaño perfecto debe ser entre 120 y 250 gramos, no más de esa cantidad, para que la carne se cocine correctamente, y tampoco menos, porque la carne durante su cocción se reduce un poco y terminarás comiendo solo pan de hamburguesa.
¿Se te antoja? Conoce nuestra receta y prepara en casa una deliciosa hamburguesa al pastor.
Pollo
Las hamburguesas satisfacen las necesidades de todos los gustos. Si no te gusta mucho la carne de res, también está la opción de hacer hamburguesas con carne de pollo, la cual es procedente de la pechuga y grasa de pollo aromatizadas con especias, entre otros. Al igual que las hamburguesas de carne de res, con las de pollo las posibilidades de ingredientes son infinitas, pero lo que debe ser perfecto en cada mordida es que esté bien cocida, con un empanado crujiente y muy jugosas por dentro.
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Pescado
Este tipo de hamburguesa con carne de pescado es la indicada para que los más pequeños en casa se coman esta proteína sin ningún problema. Las hamburguesas de pescado quedan ricas, crocantes y doradas por fuera, y lo mejor de todo es que es una opción muy nutritiva. Por lo general están hechas con pescado blanco como merluza o tilapia.
Prepara en casa una hamburguesa de atún o hamburguesa de camarón.
Opción vegetariana
Las hamburguesas no solo han variado en su presentación, sino que también con las nuevas tendencias de consumo en muchas personas. Ya sea por motivos éticos o salud, muchas personas no consumen carne de origen animal, siendo la hamburguesa vegetariana una gran alternativa. Un modo de acercarse a este público y ofrecerles una opción nutritiva y deliciosa, es preparando una carne a base de legumbres, como lo son las lentejas, garbanzos o frijoles, aunque últimamente también ha tenido una fuerte acogida la quinoa en el mundo de las hamburguesas.
Si no eres vegetariano, pero simplemente quieres otra opción para variar el menú y reducir el consumo de carnes rojas, deberías probar alguna de estas opciones de hamburguesas vegetarianas; son muy nutritivas y deliciosas, una gran fuente de proteínas, hierro, vitaminas y fibra y son bajas en grasa.
Prueba estas opciones vegetarianas de hamburguesa de portobello y hamburguesa de lenteja y quinoa.
Cocción de la carne de la hamburguesa
Después de elegir el tipo de carne con la que prepararás tu hamburguesa, ahora debes elegir el tipo de cocción. La puedes cocinar en el sartén, en una plancha, a la parrilla, horneada, frita, etc. En cualquiera de las anteriores opciones, tu hamburguesa quedará cocinada a la perfección, depende de tus gustos. En la plancha, sellarás la capa de la carne que está en contacto con la plancha y se hace más despacio por dentro, conservando sus jugos. A la brasa o a la parrilla, el cocinado es más lento y el carbón vegetal aporta un aroma y un gusto particular.
No obstante, muchos afirman que la mejor opción para cocinar la carne de tu hamburguesa es en una sartén, ya que la carne se cocina en los propios jugos que desprende, el cual es el mejor potenciador de sabor, mientras que, si las cocinas a la parrilla, muchos de esos jugos se van a perder.
FUENTES:
https://corbuse.edu.mx/blog/index.php/carne-para-hamburguesa/
https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/harry-sasson/mejor-en-casa-column-626181/
Las hamburguesas son mis favoritas, así que estos tips son muy importantes para subir el nivel cuando prepare en casa.